Ensanchar la vida

En palabras de Jorge Font: «La vida no siempre se puede alargar, pero siempre se puede ensanchar».

Ensanchar la vida significa llenarla de experiencias. No tiene que ver con el paso del tiempo, sino con lo que hacemos con él.

Se trata de usar nuestra libertad y conciencia para elegir personas, lugares y situaciones que nos nutran y enriquezcan, a veces por cuánto las disfrutamos y otras veces por cuánto las necesitamos para crecer.

Que cada vez más los prejuicios se transformen en curiosidad por reconocer que otros puntos de vista también caben en nuestra mesa, porque muestran un panorama más amplio y más justo. Que cada vez que sea necesario, seamos capaces de ensanchar nuestra mesa.

Que cada vez haya más espacio disponible en nosotros para dejar ser otras verdades, también válidas y valiosas en los zapatos de quien las experimenta. Que logremos ensanchar el corazón para ellas.

Que cada vez nos conozcamos más a nosotros mismos, para que todas las partes que nos conforman, la luz y la sombra, lo aprendido y lo que nos falta por integrar, que todo ello tenga lugar en nuestra experiencia de vida.